UN NUEVO COMIENZO
Por Cristina Zea O`Phelan
La Paz, 16 de junio de 2019
A pocos días de celebrar el año
nuevo aymara y marcar el inicio del invierno en nuestro país, creo que es
tiempo de un nuevo comienzo. ¿Pero a qué nos referimos con un nuevo comienzo?
Creo que es el momento del despertar de nuestros corazones. Sí, así como lo oyen. Hoy por hoy, me incluyo,
vivimos siempre apurados, con muchas cosas por hacer cada día y normalmente no
nos alcanza el día para terminar todo lo que teníamos planeado. El resultado es
sentirnos estresados, cansados y con pocas posibilidades de hacer un espacio
para nosotros mismos, para nuestro interior.
Mes que pasa, son más y más las actividades planificadas y por
cumplir, sin embargo la agenda para la sensibilidad casi no existe o bien, cada
vez es más pequeño el espacio. Que estos días de feriados sean el momento
oportuno para reflexionar sobre lo que somos y sobre lo que nos damos a
nosotros mismos y a nuestros seres más queridos. Démonos amor, comprensión, así
como una dosis de tranquilidad y paz. Si así lo hacemos, estaremos dando el
primer paso hacia una verdadera cultura de paz.
Descubrámonos nuevamente,
recuperemos el lenguaje universal, donde no existen barreras en idiomas, ni
entre seres humanos, animales ni plantas, pues nuestra sensibilidad e intuición
han vuelto y nuestros sentidos captan lo que nuestra sabiduría interior nos
quiere decir. De esta manera, habremos logrado reconectarnos con nosotros
mismos, pero además estaremos preparados para la auténtica reconexión con la
naturaleza, el universo entero y nuestro principal artista: ¡Diosito!!!
Querida hermana: La única manera de lograrlo es despertando conciencia, pero para ello hay que transformar el agua en vino, tal como enseñó el maestro o el plomo en oro como los alquimistas.
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